La Plaza Mayor de Trujillo fue escenario del primer grito de libertad independentista y desde el 28 de diciembre de 1972 es Patrimonio Cultural de la Nación. Sin embargo, ayer, a la gestión del alcalde Arturo Fernández Bazán no le importó esto y la convirtió en un mercado en el que unos 40 comerciantes vendían chancho al palo, ceviche, chicha de jora, pato, cabrito y hasta artesanía.
VER MÁS: Vuelvan a colocar estatua de César Acuña en campus de la UCV Trujillo
Cuestionable
La decisión de Fernández fue rechazada por las autoridades de la Prefectura y la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC); además, varios ciudadanos mostraron su sorpresa e indignación por el uso que él le da al símbolo de los trujillanos. De otro lado, los comerciantes se mostraron muy agradecidos con el alcalde porque nunca les habían permitido realizar este tipo de ferias en la histórica plaza mayor.
Además, otros ciudadanos prefirieron ignorar las críticas y también disfrutaron de la gastronomía local. Sin ningún problema, por ejemplo, pagaban 30 soles por un plato de chancho al palo.
Ante esta situación, una vez más, el Ministerio de Cultura, a través de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC), levantó un acta y denunció el atentado contra la historia de la capital de La Libertad.
Demanda
El director de la DDC-LL, David Calderón de los Ríos, aseguró que esta vez, Fernández Bazán llegó muy legos. Indicó que la Fiscalía no debería esperar una alerta para intervenir y denunciar al alcalde y los funcionarios que resulten responsables, teniendo en cuenta que existe normativa local que restringe este tipo de eventos en el centro histórico.
“Nosotros, como Ministerio de Cultura, lo que hicimos es levantar nuevamente otra acta por los daños y perjuicios que el alcalde está provocando, al distorsionar la ciudad. La asesora legal de la Dirección Desconcentrada de Cultura y la representante de la Policía de Turismo de Trujillo han constatado todo lo sucedido, para luego ser remitido a la Fiscalía de turno”, sostuvo.
La prefecta regional de La Libertad, Carolina Velasco Nalvarte, mencionó que Fernández Bazán no respeta el patrimonio y se burla de la historia de Trujillo.
“Lamentamos que el alcalde pretenda convertir a la plaza de armas en un mercado, y también lamentamos que no haga caso a las exhortaciones de nuestra parte”, sostuvo.
Además del improvisado mercado, la gestión de Fernández Bazán instaló un escenario para ofrecer un concierto, situación que propició la intervención de la Policía y la Prefectura Regional.
Su respuesta
El alcalde de Trujillo, fiel a su estilo, aseguró que no atenta contra la plaza mayor y que su intención es acercarse a la cultura europea.
“Como en Europa, donde las plazas principales sirven de concentración para que sus propios emprendedores presenten sus productos de todo tipo”, dijo la autoridad edil.
TE PUEDE INTERESAR:
- La Libertad: Implementarán con equipos de alta tecnología Hospital César Vallejo
- Trujillo: Alcaldes firman convenio para mejorar vía que une a El Porvenir con Laredo
- César Acuña sobre su estatua: La quitaron porque le mejorarán el color