Por la boca muere el pez. En un intento por defender a la mandataria Dina Boluarte del caso “Rolex”, la ministra de Vivienda, Hania Pérez de Cuéllar, confesó que antes de ser presidenta del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi), entre los años 2020 y 2021, compró en China un reloj “bamba”.
Durante una entrevista en RPP se le advirtió que tal adquisición es un “mal ejemplo”, y más si viene de alguien que encabezó el Indecopi, institución que lucha contra la piratería.
En respuesta, la ministra de Estado optó por minimizar sus dichos al remarcar que todos los peruanos compran imitaciones.
“Compré un reloj ‘bamba’, réplica, cuando fui a China. Efectivamente, eso fue hace muchísimos años. Ni siquiera sé donde está. No valía lo que puede costar un reloj auténtico. (¿Cómo va a comprar un reloj ‘bamba’?) Pues yo le preguntaría a los cientos de limeños y peruanos eso”, dijo.
Aunque admitió que fue “un error”, agregó que cuando adquirió el accesorio falso “no tenía conocimiento que había penalidades”.
“Fue hace muchísimos años. Dejémoslo ahí. Si yo cometí un error, lo cometí en aquel entonces; un error no define a la persona. Tampoco nos hagamos ciegos de que la comercialización de productos ‘bamba’ en Lima y en todo el Perú es un negocio”, insistió.
Responsables. La titular de Vivienda, por otro lado, afirmó que el caso que enfrenta Boluarte respondería a intereses subalternos.
Aunque no quiso detallar a quién se refería, descartó que se trate de Alberto Otárola. Minutos antes de la entrevista, el expremier la desmintió por insinuar que él estaba detrás del escándalo.
“Hay intereses subalternos. Hay algo que a mí me llama la atención, si la señora presidenta usa esos relojes (hace) varios meses, ¿por qué recién sale ahora la información? ¿Por qué?”, se preguntó Pérez de Cuéllar.