Una más. El segundo vicepresidente del Congreso, Waldemar Cerrón, sigue esmerándose en usar su curul como instrumento de revancha o coacción.

De otra forma, no se puede entender su proyecto de ley para crear una nueva comisión ordinaria en el Congreso, la número 25, cuyo nombre será la Comisión de Fiscalización de Jueces y Fiscales.

De acuerdo al proyecto, el grupo de trabajo será una comisión ordinaria capaz de “investigar y sancionar delitos cometidos por fiscales y jueces”.

El proyecto de ley 8678/2024-CR busca “fortalecer la labor de fiscalización del Legislativo, a la función de los jueces y fiscales a nivel nacional”.

También sostiene que creará “un marco institucional más riguroso para la supervisión y sanción de conductas corruptas, influenciando la confianza pública en el sistema judicial y en la integridad de los procesos legales”.

Cerrón sustenta su proyecto en una encuesta de marzo de  2024, que sostiene que “el 85% de peruanos no confía en la Corte Suprema” y, además, en que el 73% de ciudadanos recela de la labor de la Fiscalía de la Nación.

Como se sabe, Waldemar Cerrón es investigado junto a su hermano, el prófugo Vladimir Cerrón, por el Caso Los Dinámicos del Centro, pero no son las únicas pesquisas que tienen.

Réplica

Al respecto, el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo Vela, rechazó el proyecto de ley y aseguró que es “antidemocrático y anticonstitucional” y “refleja un espíritu totalitario de controlar a los organismos de la administración de justicia”.

En esa línea, adelantó que el Poder Judicial “no va a aceptar iniciativas de este tipo y luchará en defensa de sus fueros y su autonomía”.

“No vamos a someternos a ninguna tentación totalitaria, venga, de donde venga y defenderemos la democracia y la independencia judicial en todas las formas”, acotó Arévalo Vela.

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