Gonzalo Fernández presentó escultura que aborda el desarrollo y mística de Chan Chan.
Gonzalo Fernández presentó escultura que aborda el desarrollo y mística de Chan Chan.

El artista trujillano acaba de obtener el prestigioso XXV Premio IPAE a la Escultura, un galardón que desde 1999 celebra y fomenta el desarrollo cultural en Perú.

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La obra de Fernández se adentra en las dimensiones escultóricas y performáticas para reinterpretar los espacios y vestigios prehispánicos. Su arte no solo recupera la memoria del paisaje, sino que también propone una reconfiguración de la cartografía cultural, vinculando lo ancestral con lo contemporáneo a través de intervenciones artísticas que dialogan con el entorno.

Su pieza ganadora, “Construcción”, es un profundo estudio sobre los materiales de construcción como el concreto, utilizados universalmente en el levantamiento de las urbes modernas. Fernández explora la huella humana en estos materiales, sugiriendo una reflexión sobre el papel del individuo en la expansión urbana y la transformación del paisaje. “Construcción”, la escultura obtuvo el premio nacional, se acerca a este planteamiento conceptual y suma la evidencia más antigua de lo humano, la huella como un vestigio, al igual que en las marcas humanas en las cuevas, sobre el bloque de concreto, que es un material utilitario con el cual se levantan las ciudades donde el hombre apenas es un vestigio.

La obra se inscribe en una línea de investigación que aborda temas como el desarrollo, el progreso y el crecimiento urbanístico, conectando directamente con su proyecto previo sobre el patrimonio y la expansión urbana cerca de zonas arqueológicas significativas como Chan Chan.

El jurado, compuesto por figuras destacadas del arte contemporáneo como Carlos Caamaño (curador y gestor cultural), Lala Rebaza (artista visual y diseñadora) y Sol Toledo (artista plástica y jefa de Galerías del Británico Cultural), elogió la habilidad técnica de Fernández y la coherencia conceptual de su obra, destacando su capacidad para encarnar las luchas sociales y económicas inherentes al progreso en un país en desarrollo.

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La exposición con todas las obras participantes en el concurso se encuentra disponible en el Studio - Cultural Station del Británico de Miraflores, en Lima, ofreciendo una ventana a la vibrante escena escultórica del Perú, con representantes de Lima, Áncash, Ucayali, La Libertad, Cusco y Arequipa.

Esta muestra no solo celebra la excelencia en la escultura peruana, sino que también invita a reflexionar sobre las diversas interpretaciones artísticas del espacio, la cultura y la identidad en el Perú contemporáneo.

Fernández, quien se graduó con la medalla de Oro en la Escuela de Bellas Artes Macedonio de la Torre en Trujillo, llevó su arte más allá de las fronteras nacionales, presentándose en múltiples escenarios internacionales y destacando en el ámbito de la performance. Ha expuesto en diversos lugares, tanto en Perú como en el extranjero. Además, posee un sólido trabajo dentro de la performance, que lo ha llevado a participar en festivales y residencias en Europa.

La última exposición de Gonzalo Fernández en Trujillo fue “Arqueología del futuro. Poéticas territoriales”. En esta muestra, sus obras exploraron desde la escultura, las instalaciones y las intervenciones en diversos espacios prehispánicos las posibilidades del cuerpo y del territorio para configurar una nueva cartografía, que hile los vestigios de lo ancestral con lo contemporáneo.

“Llevo trabajando una serie de piezas que tienen como vínculo conector los materiales y algunos conceptos explorados como: desarrollo, progreso, territorio, crecimiento urbanístico. “Construcción” está muy relacionada a mi anterior proyecto, Arqueología del Futuro, Poéticas Territoriales, que fue llevada al campo del patrimonio y voraz crecimiento urbanístico cerca a los complejos arqueológicos como Chan Chan, mientras que “Construcción” va sobre la reflexión e impacto al cuerpo laboral, al cuerpo físico y el trabajo precarizado, en ese hombre en quien impacta y toda su problemática”, expresó Gonzalo Fernández.

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