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Un informe de la Gerencia Regional de Educación (Grell) de La Libertad reveló que 143 instituciones educativas públicas de este departamento resultaron con daños “graves” tras las lluvias, huaicos e inundaciones originados por el ciclón Yaku desde la primera quincena de marzo.
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La cifra representa el 5,55 % de los 2,578 centros educativos estatales de los tres niveles (inicial, primaria y secundaria) que prestan servicio en esta región. De este total, según el mismo informe, 660 (25,6 %) resultaron afectados de forma “moderada” y 1,775 (68,85 %), de manera “leve”.
Situación
De las 15 Unidades de Gestión Educativa Local (Ugeles) que integran la Grell, la más afectada es la de Ascope, que de 147 locales, 52 (35,37 %) resultaron con una afectación “grave”.
En segundo lugar se encuentra Pacasmayo, con 16,8 %. El 9 de marzo, esta provincia soportó una intensa lluvia que inundó gran parte de la ciudad y dejó centenares de damnificados.
Fuentes de dicha gerencia indicaron a este Diario que estos planteles sufrieron, en algunos casos, el desplome de sus paredes u otros daños en su infraestructura.
En cuanto a Trujillo, 10 centros educativos fueron afectados de manera grave, 4 de ellos de la Ugel del mismo número.
En la sierra, Pataz es la Ugel con más colegios “graves”: 10. Le siguen Gran Chimú y Otuzco, cada uno con 9.
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El informe, elaborado hasta el 13 de abril, también revela que 8 instituciones educativas aún no han iniciado clases de manera presencial. Dos de estas se encuentran en el distrito de El Porvenir (San Martín de Porres) y otra, en Salpo.
Se precisa además que no hay acceso a la I.E. 80259, ubicada en el centro poblado menor de Compín, en el distrito de Lucma (Gran Chimú).
En la provincia de Chepén, 57 estudiantes de la I.E. N° 80416 Javier Heraud ponen en riesgo sus vidas al cruzar el río Chamán para llegar al plantel.
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Similar situación experimentan unos 17 escolares de la I.E. N° 80697 del caserío de Celavín, que no pueden llegar al mismo debido a los desbordes de los ríos.
“Ellos viven en Quirripe (Llaguén, Sinsicap, Otuzco), pero como en este caserío no hay secundaria, deben ir a Celavín”, comentó la directora de la I.E. 80841 de Quirripe, Esther Quiroz, quien contó que debe caminar cinco horas desde Pampas de Jagüey hasta Quirripe para cumplir su labor.
Ante este escenario, el exdecano del Colegio de Profesores de La Libertad Luis Ramírez Gálvez comentó que urge una inmediata intervención de las autoridades correspondientes para dejar de exponer las vidas de los docentes y escolares, además de postergar las clases en las localidades más afectadas para atender a la población.
“La preservación de la vida está por encima de cualquier cumplimiento de responsabilidades sociales y el shock de inversión de S/ 40 millones que anunció el gobernador en el inicio de su gestión debe servir para atender las necesidades de esta población”, afirmó.
