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La joven exploradora del mundo, Natacha de Crombrugghe, de 28 años, está desaparecida desde el pasado 23 de enero. Había llegado al distrito de Cabanaconde en la provincia de Caylloma para hacer una caminata hacia el valle de Sangalle y conocer el cañón del Colca, pero no se le vio más.
La Policía ha destinado más de setenta agentes especializados en Alta Montaña desde el pasado 4 de febrero, fecha en que se reportó la desaparición, una semana después arribaron al sector efectivos del grupo “Khalpas” de Cusco y Áncash para unirse al equipo y hallar a Natacha. A esto se suma que otros detectives de Homicidios, Trata de Personas y peritos de criminalística de la División de Investigación Criminal (Divincri).
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El jefe de la Divincri, coronel PNP Marco Cuadros, dijo que ellos se encargan de recabar testimonios de los pobladores para cruzar información y verificar hacia donde pudo dirigirse la extranjera. Pero ninguno de estos esfuerzos sobrehumanos ha llevado a ubicar el hilo de la madeja, pues el informe diario de los agentes dedicados a la exploración desde el valle del Colca a la Policía es: “Sin novedad, todo sigue igual”.
La Policía informó que en la última semana, las diligencias se complicaron debido a las fuertes lluvias que se registran en la zona, lo cual provoca que los caminos que habría recorrido Natacha sean difíciles de transitar, incluso una agente cayó a un hoyo y no pudo salir por sus propios esfuerzos. Sus colegas de Alta Montaña utilizaron sogas para salvarla.
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La Policía maneja dos supuestos sobre lo que pasó con Natacha, la primera hipótesis es que, al no encontrar rastros de la turista en cuevas y quebradas, es que habría caído al río Colca, producto del impacto habría fallecido y su cuerpo estaría atascado entre las rocas y no puede salir a flote, informó la Policía.
El cuerpo no puede flotar porque para ello tiene que entrar en estado de descomposición, esto demora normalmente entre un día a dos, pero a causa de la baja temperatura de las aguas el tiempo se prolonga. La Policía estima que saldrá a flote en un lapso de 30 a 60 días, incluso a raíz de la corriente puede aparecer en Majes o Camaná, lugar donde desemboca el río Colca.
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La segunda tesis es que la joven habría sido víctima de un crimen, luego sus agresores la enterraron. Lo cual haría más difícil la búsqueda porque el valle del Colca es inmenso. Sin embargo, la Policía no cree que haya sucedido ello porque la gente de Caylloma no es agresiva, pero tampoco es descabellada, contó una alta fuente policial.
La Policía reveló que esperan la autorización de la Justicia de Bélgica que autorice intervenir el celular de Natacha, también solicitaron a la empresa estadounidense Apple acceder a la última localización, pero ello se dificulta porque tiene que tener una respuesta favorable del gobierno belga.
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La última foto que subió en sus redes sociales Natacha fue el 20 de enero, ella aparece asombrada observando el Machupicchu, tiene una sonrisa que revela su amor por conocer nuevos destinos. Tres días después llegó a Cabanaconde y a las 17:30 horas se comunicó con sus padres, luego no se supo nada de ella. Su teléfono ya no sonaba. Sus padres, el 4 de febrero reportan el hecho a la Policía y a la embajada de Bélgica en el Perú.
Los amigos de Natacha y sus familiares no pierden la esperanza de que la Policía encuentre el cuerpo de Natacha, pues no hay peor sensación para sus padres Eric de Crombrugghe, barón de Linkebeek, y Sabine Verhest, una reconocida escritora en su país, no saber nada de su hija. La historia ha conmocionado a propios y extraños, especialmente a los pobladores de Caylloma.
